El bueno, el malo y el feo

Esta es la historia, de una mujer con un dilema emocional. Raramente, escuchada por un hombre y reproducida e interpretada a mi manera, para que os haga comentó. Y tú, que harías?

Vuelvo a decirlo, raramente, las mujeres hablan ante un hombre, dos o cien, lo que les pasa por el cerebro pues, tan complejo como el sexo que representan, se les hace difícil de explicar ya nosotros pobres hombres, morta'ls, entenderlos.

Los hombres somos primarios y seguimos creyendo que el blanco es blanco y el negro es negro. Ellas, este género que me fascina y seduce, el adivino como objeto peligroso. Una ruleta rusa. Aunque estadísticamente cinco de cada seis veces no salga la bala por la boca del cañón, el juego y el peligro te dispara la adrenalina y lo pruebas una y otra vez.

Si alguien me dice que si "algo" no le entra por la vista tampoco le entra por la boca, yo le diré que mi lado femenino me comenta que si no me entra por el oído tampoco m'atraurà su boca. Vengo a decir, que la experiencia, me recuerda que la belleza se marchita y en la vejez sólo resta, la persona que ciertamente me enamora. Aquella que a mi lado me comenta y razona, como le gusta los sentimientos que le despierta el reencontrar una amistad, un amor perdido o sencillamente una tormenta.

Pero he aquí la cuestión que me lleva a escribir este post. Después de dos amores rotos, esta preciosa persona ha decidido dejar atrás rencunies de un pasado y hacer de esta temporada, la única donde ha cambiado el papel que busca una mujer enamorada, para centrarse como un hombre divorciado, en el sexo .

Sus dos amantes de temporada son contrapuestos y como dice ella misma, de ambos se podría hacer un y apuesto. El bueno y el malo. Ángeles y demonios van quemando en la hoguera de un amor particular. Uno le da la atención en los detalles, la caricias y las palabras bonitas, pero en el sexo, parece que si la satisface no será por que él le haga pieza pues, pobre hombre y no lo conozco, con ella parece que le grada la caña y no le da.

El otro hombre y éste si, he podido hablar, tal vez mejor que calle pues, no le habla sino que le llama y le protesta, en todo detalle ve el error y como no, él lo haría mejor. Pero la mujer, esa que se ha buscado a los dos amantes, le va la caña, ya os lo he dicho y le falta una natjada esta noche para volver a dormir caliente.

A mí me pregunta que me parece y antes yo no diga nada, ya me contesta. Lo malo, le llena las noches de soledad y el bueno, de mensajes que la hacen contenta, aunque cuando lo ve, "ni chicha ni limoná".

En una mesa de diez personas, cuatro hombres buenos y feos compartimos la mesa con seis mujeres valientes. Salen a parar fresco sin otra motivación que la de pasar el rato y descansar de la búsqueda del amor. Todos juntos hemos entendido que el amor no se busca cuando se encuentra.

Se para ti, amiga mía confidente, que aconsejo con estas cuatro líneas que pases de uno a otro amante como has hecho hasta ahora y que cuando te canses, ya tendrás tu momento, para pensar en la próxima relación que seguro, un día u otro te llegará.

Yo no sé si será en junio o noviembre, pero vigila con lo que deseas porque un día, los sueños se cumplen y ya se sabe, que la realidad casi siempre supera la ficción.