Sentido común, el menos común de los sentidos

Como persona me declaro Autónomo, abro las 24 horas, 365 días al año y cuando me da la gana, cierro. Me mueve el sentido común, el menos común de los sentidos. Nadie decide por mí, soy suficientemente responsable para dar el "servicio" que he prometido. Cumplo. Soy amigo de mis amigos.

Como todos, tengo mis días buenos y malos. A veces, me rodeo de gente con la que me gusta compartir este estado anímico, las alegrías o las penas y ellos, autónomos, cumplen. Por eso, cuando creo que alguien puede necesitarme a su lado,  estoy ahí.

Esto me lleva problemas y alegrías. Como en todo, en la vida,  cada maestrillo tiene su librillo. Cada uno debería pensar y hacer lo que quisiera y si esto no afecta negativamente a nadie, adelante.

De talante, soy como soy. Particular o como a veces me he definido, raro. Miro por mi sin pensar, que esto provocará apatía o malas reacciones de quienes me rodean. Si a alguien he herido, lo siento. Lo intentaré arreglar. Me excuso e intento rectificar. La verdad, muchas veces no lo puedo conseguir y al final, termino herido yo mismo.

"Más vale lo que se calla que lo que se dice", refrán popular que mi madre me enseñó de pequeño y que  al parecer, nunca he hecho caso. Conocéis la expresión "si no lo digo, reviento"? Pues, vamos.

Me gusta rodearme de amigos y amigas. Cuantos más seamos más vamos a reirnos. No me gusta ser sectario. Si a ti te va bien, a mí también, aunque a veces no mucho y otras veces, nada. No te juzgo. No me quedo donde no me quieren, a mí, a mis amigos, o los amigos de mis amigos.

A toda costa, seguir los dictados de mi corazón. Ser fiel conmigo mismo, seguir mi intuición y mostrarme firme, coherente y consecuente con mis propias decisiones pues, me fijo mis limites y me aportan seguridad. Cuando traiciono mis principios, todo se derrumbaba a mi alrededor.

No necesito la aprobación de nadie, aunque seguramente la deseo o me gusta que me demuestren su apoyo. Cuando alguien expresa respetuosamente una opinión radicalmente opuesta a la mía, la curiosidad me gana y me pide que me acerque, aunque quizá después, huya a la velocidad del rayo.

Cuando he estado incluido en las supuestas listas del bien o del mal y estas se convierte en un lobbie cerrado donde los miembros defienden el estatus y condición para incluir a uno, bajo la votación por mayoría de los demás,  hay  veces en que uno quiere llevar la voz cantante y se acaba imponiendo, por tanto, es una lista a la que yo no quiero pertenecer. Democráticamente, se han cometido los crímenes más terribles de la historia. Todo el mundo sabía lo que estaba mal, aunque nadie hizo nada para evitarlo. Las masas son tontas, manipulables y fácilmente, influenciables.

La condición humana ha evolucionado y permitido que el individuo, disponga de pensamiento propio gracias a los conocimientos adquiridos y experiencias vividas. La opinión de uno, puede ser o no compartida, en todo o en parte, gracias a la opinión formada y que día a día, puede evolucionar o cambiar de acuerdo a un sinfín de circunstancias. Tu o yo por encima de la de los demás, nunca.

Carpe Diem. Vive y deja vivir!